En la actualidad podemos encontrar disponibles distintos métodos de calefacción para el hogar, cada uno de ellos tiene sus ventajas y sus desventajas, pero todos tienen el objetivo principal de mantener caliente el hogar o una habitación durante la época de frío. Algunos lo hacen maximizando el ahorro de energía para que la factura de la luz no sea muy elevada.
Los emisores térmicos son excelentes para calentar una zona localizada de nuestro hogar, siendo considerados como la mejor forma de hacerlo.
¿Aún no tienes claro qué son los emisores térmicos y cómo se utilizan? Entonces, has llegado al lugar indicado, ya que aquí te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre los mismos.
Contenido
¿Qué es un emisor térmico?
Los emisores térmicos son un equipo de calefacción que se fija en la pared y que se tiene que conectar a la red eléctrica para poder funcionar. El funcionamiento principal de los emisores térmicos destaca cuando es el momento de aclimatar una habitación.
Funcionan gracias a un principio de inercia térmica con el que son capaces de conservar el calor durante mucho tiempo, mucho más tiempo que el que presentan otros sistemas de calefacción. Esto se debe a que suelen usar hasta un 30% menos de energía que otros sistemas de calefacción.
¿Qué tipos de emisores térmicos hay y cómo funcionan?
Para poder entender cómo funcionan, primero es importante conocer los distintos tipos de emisores térmicos que hay disponibles en el mercado.
Emisores térmicos de aluminio
Los emisores térmicos de aluminio tienen la característica principal de que pueden conservar el calor en su interior, el cual está hecho de aluminio.
El diseño de estos emisores puede transmitir el calor por medio de la conducción, además de que se calientan con gran rapidez, siendo esta una de sus principales ventajas. Sin embargo, el calor suele durar poco tiempo y normalmente se pueden usar por un tiempo máximo de 5 horas.
De los emisores térmicos, este tipo es el que consume más energía.
Emisores térmicos de fluido
El emisor térmico de fluido tiene una resistencia líquida que está en su interior y que hace que sea capaz de conservar el calor. De esta forma el calor puede circular por el interior del emisor gracias a este líquido.
En comparación con el emisor de aluminio, este tarda más tiempo en calentarse, pero puede conservar el calor durante más tiempo (hasta 8 horas).
Emisores térmicos cerámicos
Cuando hablamos de los emisores térmicos cerámicos estamos hablando del más eficiente que hay disponible en el mercado. En su interior tiene una resistencia que está hecha de un material cerámico sólido.
Gracias a este material tiene una excelente conductividad y una buena inercia térmica. Sin duda alguna es la mejor opción que se puede conseguir en el mercado.
Ventajas de usar un emisor térmico
- No generan humo, gases, olores y no resecan el ambiente.
- Son muy fáciles de instalar al atornillarse sobre la pared.
- Tienen un programador que permite mejorar su eficiencia y el consumo.
- Se integran muy bien con el ambiente proporcionando un confort agradable.
Consumo de los emisores térmicos
Uno de los aspectos más sobresalientes sobre los emisores térmicos es que tienen una tecnología incorporada que se encarga de gestionar de forma eficiente la energía, incorporando un cuerpo de aluminio de extrusión/inyección que se encarga de transmitir el 100% de la energía que es generada.
Sin embargo, el consumo depende del tipo de emisor térmico y del modelo, por lo que esto debe revisarse antes de tomar una decisión final.
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